Alrededor de la tercera parte de la población mayor de 65 años sufre problemas de audición. La prevención y el diagnóstico precoces son fundamentales para reducir sus consecuencias.

Se calcula que un 8% de la población española padece este trastorno. Ante este panorama los expertos en corrección auditiva insisten en la necesidad de cuidar los oídos y

acudir al especialista ante la menor sospecha. Aproximadamente la mitad de los casos se podrían prevenir siguiendo unas medidas de protección.

A la cabeza

España es el segundo país más ruidoso del mundo según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Este dato nos tiene que hacer estar más alerta si cabe para limitar los niveles

de ruido de nuestro alrededor. Si además trabajamos en ambientes con equipos muy sonoros, deberemos tomar más precauciones.

Ojo con los cascos

Uno de los hábitos que puede llegar a ser nocivo es el uso de dispositivos musicales con un volumen demasiado alto. Modera la utilización de auriculares.

Las infecciones crónicas (como la otitis recurrente) constituyen también una de las causas más habituales para la pérdida auditiva. Evítalas siguiendo unos cuidados e higiene

adecuados.

Diagnóstico precoz

La mejor prevención es cuidar nuestra salud auditiva desde edades tempranas. Una simple audiometría una vez al año en un centro especializado puede detectar un problema de

audición y tratarlo a tiempo. La prevención, el diagnóstico y el tratamiento nos ayudarán a conservar nuestro oído.

Claves para un oído sano

1. Acudir a exámenes auditivos periódicamente.

2. Prestar atención a los niños con problemas para comunicarse.

3. Tratar sus infecciones de manera precoz.

4. No sobreexponerse a sonidos de gran intensidad.

5. Usar protección auditiva en trabajos ruidosos.

6. Mantener un volumen moderado en los dispositivos de música y usarlos poco tiempo.

7. Evitar el consumo de medicamentos ototóxicos sin prescripción médica.

8. Llevar una dieta sana y equilibrada y huir del tabaco.

9. En piscinas y playas, utilizar protectores.

10. No introducir objetos (como bastoncillos).