Los talones agrietados son un problema principalmente estético, pero también pueden causar sangrado en los casos más severos. Así puedes deshacerte de ellos.

La piel es una barrera que nos protege frente a microorganismos externos impidiendo su entrada. Por este motivo, es importante mantenerla hidratada y cuidada para que no pierda

su continuidad.

Sin embargo, distintas regiones de la piel tienen mecanismos hidratantes diferentes. La piel del pie, en particular, tiene capacidades de hidratación pobres, porque no genera

sustancias grasas de la misma manera que, por ejemplo, la cara. Además, es 50 veces más gruesa que otras partes más frágiles del cuerpo, y esto contribuye a su resequedad.

Por esta razón, los talones resecos son un problema que hay que solucionar antes de que deriven en un problema mayor en lo estético y clínico.

Los talones resecos pueden causar descamación, picor y enrojecimiento, y rugosidad y grietas que sangran en los casos más severos. Estos 3 remedios naturales y caseros te

ayudarán a deshacerte de ellos permanentemente.

Tratamiento con miel

Lo único que necesitas es un cubo de agua tibia y una taza de miel lo más natural posible. Lo que debes hacer es añadir la taza de miel en el cubo de agua tibia y sumergir los pies

allí durante 15 o 20 minutos. Aprovecha para realizar suaves masajes y potenciar los efectos del tratamiento.

Luego del tiempo esperado, saca los pies del agua y, con una piedra pómez, raspa los talones suavemente. Si así lo deseas y tienes los medios, puedes agregar una crema hidratante

una vez que tus pies estén bien secos y limpios.

Uso de aceites

Los aceites son tal vez el método más asertivo para combatir los talones resecos, ya que son muy humectantes, además de ser generalmente menos complicados en cuanto a los

procedimientos necesarios para que surtan efecto.

Puedes usar aceite de coco o aceite de oliva, y lo único que realmente debes hacer es aplicarlo suavemente en las regiones afectadas hasta que tu piel lo absorba por completo.

Luego, simplemente continua con tu día normalmente.

Este tratamientos se favorece de realizarlo periódicamente para que sus efectos empiecen a condicionar el estado de la piel difícil de nuestros talones y mejoren sus condiciones.

Tratamiento con plátano

Haz puré con 2 plátanos maduros hasta que obtengas una masa suave y homogénea. Debes asegurarte de que sean maduros, de lo contrario contendrán un ácido que es agresivo

contra tu piel.

Frota suavemente la pasta por todos tus pies, incluyendo las camas de las uñas y el interior de los dedos de los pies. Déjala descansar por unos 20 minutos en tus pies y luego retírala

con agua limpia.

El plátano es un hidratante natural de la piel, pues contiene vitamina A, B6 y C, por lo que realizar este proceso cada noche durante 2 semanas o hasta que estés satisfecho con sus

resultados hará maravillas en tu piel.

Todos estos procesos son completamente naturales y no requieren más que unos pocos ingredientes que muchos ya tenemos en nuestros hogares. Solo de debemos aprender a

aprovecharlos.